Castro lanza un mensaje apocalíptico pero «olvida» a sus amigos Chávez y Ahmadineyad

El dictador Fidel Castro ha aparecido en un vídeo para lanzar un nuevo mensaje apocalíptico por una futura guerra nuclear responsabilizando a EEUU e Israel. Lo que olvidó mencionar es la visita a Irán de su amigo Hugo Chávez para reunirse con Ahmadienyad y así hablar de su programa nuclear.

2010-10-22

MARTÍN HIGUERAS / IBEROAMÉRICA

En un vídeo cuidadosamente preparado con imágenes de ataques y pruebas nucleares realizados hace ya varios años, el dictador no dejó de advertir, en un tono más que apocalíptico, de las consecuencias de un ataque nuclear en el mundo. Castro, señaló que «todas las armas nucleares o convencionales deben desaparecer».

El mensaje que fue difundido por la página web Cubadebate, que se presenta como una plataforma que lucha contra lo que llama «terrorismo mediático» y que utiliza constantemente la dictadura, Castro pide tener «el valor de proclamar que todas las armas nucleares o convencionales, todo lo que sirva para hacer guerra, deben desaparecer», aunque en ningún momento se refirió a la enorme compra de armas que ha realizado su amigo Hugo Chávez en los últimos meses a países como España y Rusia.

También apunta que «el uso de las armas nucleares en una nueva guerra implicaría el fin de la humanidad» y agregó que «hoy existe un riesgo inminente de guerra con [el] empleo de ese tipo de armas y no albergo la menor duda de que un ataque de Estados Unidos e Israel contra la República Islámica de Irán, se tornaría, inevitablemente, en un conflicto nuclear global». En este caso, tampoco mencionó que hace sólo dos días, Chávez visitó a su otro gran amigo, Mahmud Ahmadineyad, con el que habló sobre asuntos energéticos, y en especial sobre la ayuda que el país islámico podrá darle a Venezuela en materia nuclear. El propio bolivariano señaló en Teherán que «nuestra amistad tiene un gran significado. Somos dos pueblos unidos en el establecimiento de un nuevo orden mundial más justo y humano» y agregó que la relación entre ambos países era una «alianza estratégica». Además, profetizó que «el fin del imperialismo está cerca».

El dictador cubano dijo además que «cualquier gobierno del mundo está obligado a respetar el derecho a la vida de cualquier nación y del conjunto de todos los pueblos del planeta» y terminó señalando que «los pueblos están en el deber de exigir a los líderes políticos su derecho a vivir. Cuando la vida de su especie, de su pueblo y de sus seres más queridos corren semejante riesgo, nadie puede darse el lujo de ser indiferente, ni se puede perder un minuto en exigir el respeto a ese derecho; mañana sería demasiado tarde».